Por tercera vez en un año lo metieron preso por robarle a los mismos vecinos
Cristian "El Jala" Flores salió del penal hace menos de tres meses y este jueves regresó. Hace un año cumplió los 18 años y, desde entonces, ya estuvo tres veces en la cárcel. Todas las veces fueron por robos, en su mayoría, por saquearle en varias ocasiones a las mismas personas.
Hace menos de tres meses Cristian "El Jala" Flores salió del penal de San Luis. Pero antes de que sus compañeros de celda empezaran a extrañarlo, ya está de regreso. Otra vez lo imputaron y lo enviaron preventivamente a la cárcel por robarle por tercera vez al mismo vecino. Hace exactamente un año cumplió los 18 años y, desde entonces, ya estuvo tres veces en el Servicio Penitenciario, siempre por robar o intentar robarle a los vecinos a los que ya ha saqueado antes.
Pero eso no es todo. El fiscal que lo acusa por el otro par de delitos por los que estuvo preso anteriormente deberá ratificar esas imputaciones la próxima semana. Si esas causas en su contra siguen en pie y es enjuiciado no habrá atenuante que lo salve de una condena con cumplimiento efectivo tras la rejas.
Mientras tanto "El Jala" estará encarcelado los siguientes 30 días. Su última fechoría la cometió el viernes 2 y la sufrió un hombre que vive por calle Juan Saá, a "la vuelta de su casa", refirió la fiscal instructora Daniela Torres. Entró al domicilio de la víctima, después de trepar un tejido olímpico y le sustrajo varios elementos de la vivienda, informó la Policía.
El personal de Canaf (Comisaría de Atención a la Niñez, Adolesencia y Familia) de Villa Mercedes no puede decir con exactitud a cuántos robos y hurtos estuvo vinculado Flores cuando era adolescente. "Son innumerables", expresó una fuente. Pero jamás fue preso por ser menor de edad.
Eso se terminó el 10 de agosto de 2023, cuando cumplió los 18 años. No obstante la posibilidad de caer detenido tampoco lo intimidó y, a dos días de su cumpleaños, volvió a robar. Ingresó a la ferretería de un vecino y le sustrajo un par de palas y unas chapas.
Lo arrestaron, pero un juez de Garantías lo dejó en libertad porque consideró que era demasiado joven para ir preso y, una semana después, volvió a saquear al mismo ferretero. Esa vez ya no hubo defensor público ni privado que lo salvara de la prisión preventiva. Lo imputaron y lo enviaron al penal.


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