"Le cortamos la cabeza a la cascabel": el juez Nacul habló tras caer la banda de Insúa

El juez federal de Villa Mercedes, Juan Carlos Nacul, brindó detalles inéditos sobre el operativo que desmanteló una red de narcotráfico liderada por el sindicalista Juan Carlos Insúa. El magistrado calificó la investigación como una de las más complejas y extensas que ha enfrentado el juzgado, y confirmó que el grupo criminal movía alrededor de 6 kilos de cocaína por semana, lo que representa un circuito de 2.160 millones de pesos en apenas seis meses.

"Fueron dos semanas infernales. Esto es una investigación que llevó años. Muy difícil, muy compleja, por la cantidad de personajes que se fueron sucediendo", aseguró Nacul en una entrevista radial. Según explicó, todo comenzó con la detención de tres personas con más de un kilo de cocaína, y a partir de las escuchas se descubrió la red completa.

"Le cortamos la cabeza a la cascabel. Y ahora voy por los huevos, para que no se reproduzca", graficó Nacul al referirse al impacto de los más de 30 allanamientos simultáneos realizados con apoyo de casi 100 efectivos de Gendarmería Nacional.

La organización estaba encabezada por Insúa y su hijo, quienes usaban como fachada su rol gremial. "Insúa hablaba con un cómplice: ‘Si la Gendarmería me paró en Pilar...’", relató el juez. La droga era provista por un cartel peruano, que a su vez se abastecía desde Bolivia. El ingreso se hacía por Punilla, desde donde se distribuía hacia Merlo, Carpintería y Villa Mercedes.

El magistrado destacó el rol clave del nuevo Código Procesal Penal Federal, que otorga mayor protagonismo a la fiscalía: "La fiscalía tiene un protagonismo importante y yo actúo como juez de control y garantías. Autorizo detenciones, allanamientos y secuestros cuando se respeta la constitucionalidad de las medidas".

Sobre el impacto económico del negocio, Nacul detalló: "Se comercializaban 6 kilos por semana. A 15 mil pesos el gramo, son 90 millones por semana. En seis meses, 2.160 millones de pesos". Y advirtió que ese dinero se lavaba mediante la compra de vehículos, propiedades y voluntades.

Consultado sobre la continuidad de la investigación, fue tajante: "Estamos recién en la etapa embrionaria. Faltan peritar más de 50 celulares. Es una caja de Pandora".

También dejó entrever que podrían surgir implicados de peso político o social: "Yo estoy tranquilo porque no soy de aquí ni tengo amigos ni enemigos. Pero va a haber muchos personajes conocidos".

Todos los imputados están alojados en el Servicio Penitenciario Provincial, a la espera de definiciones judiciales. "A más tardar el lunes a media mañana salen las resoluciones contra todos los imputados", confirmó el juez.

La pena prevista para los organizadores es de 6 a 20 años de prisión, bajo los agravantes de la ley 23.737. "No pueden acceder a beneficios. No hay morigeración, no hay domiciliaria, porque las penas mínimas superan los tres años", explicó.

Nacul cerró con un llamado a la ciudadanía: "La gente ya le está perdiendo el miedo a estos tipos. Muchas de estas investigaciones surgen de denuncias anónimas. Si no entra droga, no hay consumo. Si no hay consumo, no hay adictos. Si no hay adictos, no se mueren nuestros jóvenes".