Reducirán el gasto público para estabilizar el Municipio

No tenemos ni para comprar un foco". Con esa frase Maximiliano Frontera graficó el estado financiero del Municipio. A raíz de eso, el intendente anunció que reducirán el gasto público hasta en un 70%, para estabilizar la administración de la Comuna. Insistió en que no tendrán más de 80 funcionarios y que dieron de baja las flotas de celulares y la contratación de autos particulares. "Creemos que en tres meses podemos mejorar la situación", aseveró.

El martes por la mañana, en el salón Azul, dio una conferencia de prensa con los detalles del panorama actual. Estuvo acompañado por la viceintendenta Verónica Bailone, el secretario de Economía y Finanzas Nicolás González Ferro, y el responsable de Infraestructura, Obras y Servicios Urbanos Sebastián Estrada.

Los funcionarios hicieron hincapié en los impuestos, gastos e infraestructura. Por su parte, González Ferro explicó que solo el 39% de los contribuyentes pagó las tasa de servicios en el último año, cuando en períodos anteriores superaba el 60%. Y recalcó que el sector comercial es el que menos aporta.

A pesar de esto, indicó que los gastos de la Comuna no bajaron y que se incrementaron en la contratación de personal. "Entre 2011 y el 2019, la Municipalidad pasó de tener 72 funcionarios a tener 178. Y actualmente hay 1.017 empleados. Esto repercute en un 31% de la masa salarial", dijo.

Frontera comentó que crearon una comisión investigadora que se encargará de rever los contratos de exfuncionarios que pasaron a planta permanente en los últimos meses. "Hay muchos casos en los que no cumplen con los requisitos necesarios. En los próximos días daremos a conocer toda la información", anticipó.

Si bien González Ferro admitió que la moratoria que aplicó la gestión anterior fue válida, ya que generó ingresos que ayudaron a "reducir los impactos negativos", advirtió "que no se utiliza con justicia social, porque la gente que tiene capacidad de pago espera hasta último momento para abonarlo, y eso genera una caída en los ingresos".

También dijo que registraron  una deuda con proveedores que llega a los 24 millones. Y otra de 6 en transporte. "Además hay una cartera de juicios que ronda los 21 millones", añadió.

Estrada comentó que en Obras Públicas el desfasaje económico es similar. "En los depósitos no tenemos ningún tipo de stock para seguir trabajando en el mantenimiento de los sistemas. No hay lámparas, ni células de corte para la iluminación, o material eléctrico alguno que dispongamos para soluciones inmediatas".

Asimismo resaltó que en la ciudad hay 2.300 baches. "De las 4 mil cuadras, el 50% tiene alguna rotura que atender", manifestó y agregó: "Hay 5.800 reclamos registrados en el 147 sin solución, la mayoría por iluminación. Es notable que no hubo un plan de mantenimiento en los últimos meses. Nos encontramos con una ciudad parada. La situación es crítica, pero vamos a buscar la forma para sacar el Municipio adelante. Nos vamos a regir con el pedido del intendente: 'hacer mucho con poco'", aseveró.

Frontera agregó que otro de los inconvenientes que encontraron luego de asumir es la "falta de controles en el consumo de insumos, especialmente del combustible. "Estamos trabajando para mejorar esto. Le pedimos a la gente que nos tenga paciencia, lo vamos a arreglar", aseguró.