Fernando Reyes y otras historias de diván

Los maestros que formaron a Fernando Reyes a lo largo de su carrera como psiquiatra le enseñaron una premisa que hasta la actualidad lleva marcada en sus pensamientos: "El médico que solo sabe de medicina ni siquiera de medicina sabe". La frase se repite en sus palabras y se aplica en la vida cotidiana y su rutina de consultas, pacientes y sesiones.

El mismo dicho que marcó su perfil profesional le abrió las puertas para ahondar en la literatura y así, después de prepararlo por tres años, editó "Entrevivientes: memorias de un médico errante", un libro que se animó a escribir en soledad y este viernes será presentado formalmente a las 18 en el Microcine de la UNSL.

La publicación cuenta con cuatro capítulos con el objetivo de que en cada uno de ellos los ojos se posen en la psiquiatría, pero también en la narración, dos gustos que se entremezclan a diario en la vida de Fernando.

"'Entrevivientes...' presenta historias de la raza humana. Es un collage que refleja íntimamente lo que viven o sienten las personas", adelantó Reyes, quien ya tiene dos publicaciones, pero realizadas de manera colectiva.

En el capítulo central, el autor describe y narra situaciones que le tocaron vivir con pacientes dentro del consultorio. "Algunas me interesaron un poco más y con los casos más relevantes construí historias atractivas para el público en general. Lo bueno es que el libro no tiene pretensiones médicas", expresó Reyes, que nació en San Juan, pero llegó a San Luis en 1991 para formarse como médico, formar su familia y ejercer su profesión.

El psiquiatra adelantó que los demás capítulos del libro se vinculan con diferentes temas como la desaparición de personas en la última dictadura militar y los familiares que aún las buscan; el rol del psiquiatra en San Luis y cómo un hecho en concreto afecta a varios de sus pacientes. También "Entrevivientes..." habla de los personajes célebres de la historia y la cultura que directa o indirectamente se vinculan con la propia historia del profesional.

"Desde mi punto de vista indagué sobre facetas no tan conocidas de ellos y dentro del libro revelo sus partes más personales y controvertidas. Es una lectura fraterna", explicó Fernando que se relaciona con la mirada médica de Ernesto "Che" Guevara, la música de Violeta Parra, que lo marcó desde que era joven, y la inteligencia de Bobby Fisher a quien, desde el día que el autor conoció el ajedrez, no paró de investigarlo.

"Empecé a recolectar la información de este libro hace tres años. Traté de complementar la práctica terapéutica y psiquiatra con la cultura, la docencia y la escritura".