Inclusión con mirada futurista

Emilia Iglesias tenía que regresar a México, pero la cuarentena la obligó a quedarse junto a su mamá  en San Luis. Para aprovechar, porque ya sabían que el tiempo pasaría muy lento, decidió inscribirse en el taller de teatro que Micaela Coria y Carlos Facini comenzaron a dictar en la Fundación Par 21 para chicos y chicas con o sin discapacidad.

La virtualidad invadió el taller y las clases comenzaron a dictarse con videollamadas y grupos de WhatsApp de por medio. En paralelo, Emilia debía presentar para sus clases virtuales del colegio, una obra de teatro. El círculo comenzaba a alienarse.

En su pequeña cabeza de diez años nació "Negra nieve", una obra futurista situada en el año 4020. A los pocos días decidió compartirla con sus profesores puntanos y sus compañeros y compañeras, quienes se entusiasmaron para comenzar a darle forma y armar la obra que mañana se estrenará en la página de Facebook de la fundación.

La obra de teatro cuenta con la participación de 14 jóvenes que  narrarán una historia que tuvieron que crear en plena virtualidad, armar sus personajes y darle forma a lo que presentarán como una idea colectiva.

"Emilia nos mostró el esqueleto de la obra y comenzamos a transformarla. Construimos otros personajes, mutamos el escenario y creamos lo que hoy es 'Negra nieve', una historia futurista con temática social y que rescata la autonomía de las y los jóvenes con discapacidad", contó Micaela.

La obra tiene como protagonista principal a "Negra nieve", pero con el pasar de la historia llegan otros personajes que logran darle un giro a la historia, como por ejemplo la reina Malovada, Pepe el mayordomo, el científico Sobernadousky, el sicario Chily y el consejo de sabios y hadas, los elegidos para transformar la obra y darle calor y color.

"Cada uno tuvo que lograr su personaje en sus hogares, con poca ayuda de sus familias y total responsabilidad ante la tarea. Logramos un resultado divertido con experiencias de todo tipo que involucraron a los y las alumnas en un proyecto repleto de inclusión y diversidad", expresó la profesora.

Para el equipo, lo importante fue el trabajo colectivo, la creación de la escena y el buen desempeño de las y los actores. "Como dijo Galeano, cada persona brilla con luz propia y ellos supieron cómo lograr que sus chispas no se apaguen", concluyó Micaela.