Más de 300 comercios pidieron la habilitación entre enero y noviembre

En lo que podría ser tomado como un signo de reactivación económica, este año hubo muchos emprendedores que se animaron a invertir, a levantar las persianas y empezar un nuevo negocio en Villa Mercedes. De hecho, entre enero y noviembre, hubo más de 300 solicitudes de habilitaciones comerciales que se tramitaron en el Municipio en diferentes rubros, según datos proporcionados por el área de Control Urbano.

Aunque estuvieron repartidos en diferentes sectores de la ciudad, la mayoría de los nuevos locales se instalaron en el centro y en la zona Estación, o en las avenidas de mayor flujo comercial como son la 25 de Mayo, la Presidente Perón y la Aviador Origone.

La categoría en la que más se sumaron iniciativas fue la de venta de bienes comestibles, a la que sumaron 125 kioscos, almacenes, despensas y mercados que ofrecen alimentos entre sus góndolas y estanterías.

En cambio, la Comuna divide en otro apartado a los negocios que comercializan productos que no se comen, en el que entran desde las tiendas de ropa hasta las ferreterías, por ejemplo. Se incorporaron 62 en lo que va del año.

Y hubo 61 trámites para obtener la habilitación para ofrecer servicios de todo tipo, entre los que se incluyen los de reparación y mantenimiento.

Hay un cuarto rubro, que si bien fue el que menos pedidos tuvo, está vinculado a uno de los sectores que más ha crecido en comparación con años anteriores en la ciudad. Se trata de los locales gastronómicos, a los que se agregaron 55 nuevos restaurantes, comedores, bares, heladerías y pubs, entre otros.

La mayoría de estos espacios se abrieron en el último trimestre, cuando hubo una relajación en las restricciones sanitarias que habían tenido paralizado al sector durante 2020 y una buena parte de 2021.

Roberto Ambroggio, quien trabaja en proyectos gastronómicos en la ciudad desde hace unos treinta años, fue uno de los que se animó a invertir para lanzar un nuevo emprendimiento.

"Recuperamos un edificio histórico que estaba destruido y lo acondicionamos para hacer una parrilla, con cervecería y bar", contó el hombre que renovó la tradicional sede del Jockey Club.

El mayor desafío de iniciar un negocio en un contexto de pandemia, sostuvo, es no saber hasta cuándo podrán recibir al público o deberán exponerse a un cierre para frenar el avance del coronavirus. "Nosotros vivimos de esto y es lo que sabemos hacer. Siempre pensamos en Villa Mercedes y tratamos de innovar", expresó.

De todos modos, dijo que las propuestas se han diversificado mucho en la localidad en los últimos años. "La cantidad de tiempo que estuvimos encerrados hizo que la gente tenga ganas de salir. Por eso, vemos que responden y nos apoyan", aseveró.