Tierra de libertad

Si el presente es brillante es porque hubo un pasado oscuro donde los derechos fueron violentados y la comunidad LGBTIQ+ tuvo que vivir en el silencio y la penumbra. Hace treinta años era imposible que los gays, lesbianas y transexuales se reunieran en un lugar específico para celebrar y ser felices porque la represión y el hostigamiento los perseguía por donde iban. Hoy las críticas y las miradas de odio permanecen pero los derechos y la libertad se transformaron en grito de lucha y alegría. Nadie puede callar a quien se siente libre y orgullo de ser quien es.

Para afirmar la alegría, el sábado por la noche en el espacio Royal arena se celebró la Fiesta Nacional del Orgullo donde se eligieron los embajadores que representan al país y además hubo performances y djs hasta altas horas de la madrugada que mantuvieron la llama de la libertad más encendida que nunca.

Los 18 candidatos de diferentes provincias estuvieron presentes en el salón y luego de la deliberación del jurado quedaron elegidos dos. Por un lado, Pablo Amílcar Ramírez de San Luis y Delfina Brizuela de Santa Cruz.  La felicidad y la emoción invadieron el escenario y los elegidos expresaron su alegría al pensar en las y los miembros de la comunidad que lucharon por tantos años por la conquista de derechos y muchos de ellos hoy ya forman parte de la memoria y el recuerdo colectivo.

Como una verdadera fiesta, la noche tuvo brillos, baile y humor. Uno de los sectores más concurridos fue el espacio de glitter donde los rostros se llenaron de brillantina, blush y maquillaje artístico. Además contó con un set especialmente armado para sacarse fotos.

Una de las sorpresas de la noche fue la presencia de Thelma Fardin. La actriz llegó a la provincia para la disertación que realizará mañana en Parque de las Naciones pero antes no quiso dejar de divertirse con sus amigas y amigos puntanos.

Antes de la elección de embajadores, que tuvo un jurado integrado por representantes de diferentes instituciones vinculadas con la diversidad del país, se presentaron diferentes performances. Estuvo La Pocha, el personaje icónico de Ezequiel Marchán, quien llevó su humor característico junto con sus bailarines y Francis, su fiel compañero. Desde San Juan llegó Lady Morgana con un vestido brilloso dorado y Drago, un exuberante artista que conquistó con sus botas altas y su vestuario esplendoroso.

Otros representantes puntanos que mostraron su talento fueron Agostina Muñoz y Nicolás Germanotta que bailaron diferentes coreografías y no dejaron de hacerlo durante la presencia de las djs invitadas.

Redacción/ALG