Emociones dibujadas

Dentro del consultorio de Alina Foresti, las infancias expresan sus emociones y sentimientos. Otras se los guardan y cuesta que salgan al exterior. Como una herramienta de apoyo, la psicóloga, junto a su colega Samanta Hüppi, publicó “Guille y el árbol de flores azules”, un libro dedicado a la autoestima.

Las autoras estudiaron en la universidad de Córdoba la carrera de Psicología y tenían la cuenta pendiente de armar un proyecto vinculado con las infancias que toque temas como la educación emocional, la orientación sexual y la discapacidad, entre otros.

El único inconveniente que encontraron para concretar el objetivo fue la distancia. Luego de terminar su carrera, Alina decidió volver a San Luis para ejercer su profesión y Samanta siguió con su trabajo en Córdoba. Los días de pandemia las ayudaron a encontrarse en la virtualidad y la historia comenzó a gestarse entre videollamadas, mensajes de texto y notas de voz.

“Pensamos en un proyecto que tenga una mirada inclusiva y que toque sutilmente varios temas necesarios para las niñas y niños. Es un trabajo independiente realizado a pulmón”, contó Alina.

Como todo libro de literatura infantil, las ilustraciones son la clave para llamar la atención de los pequeños. Además, “Guille…” está escrito en imprenta mayúscula, para quienes incursionan en las primeras lecturas, y tiene una serie de juegos para que las familias acompañen. Quienes deseen adquirirlo pueden encargarlo en la página de Instagram que lleva el nombre del libro.

La ilustradora del libro es Dolores Guadix, de La Plata, quien se sumó a la aventura de crear por medio de la virtualidad. “Hubo bocetos que viajaron por mensajes de texto y mails. Aciertos y errores que fueron documentados por WhatsApp”, aseguró la autora.

“Guille…” cuenta la historia de un niño que tiene diferentes emociones de acuerdo a lo que pasa dentro y fuera de su familia y el ámbito que lo rodea. El pequeño vive junto a sus padres y su hermano con discapacidad, quien lo lleva a trabajar su autoestima. “Sentimos que es una herramienta para hablar directa o indirectamente de varios temas que son importantes para las infancias. La diversidad, los límites impuestos y el acompañamiento de los padres junto con un pequeño que descubre el mundo desde su mirada”, explicó Alina.

Además, agregó que las autoras en el libro se corrieron del papel de adultos para ponerse a la altura de los niños, que tienen su propia voz y sus elecciones. "Dejamos de lado las imposiciones y les damos la palabra para que se expresen”.

El libro llegó con el firme propósito de las autoras de ayudar y la necesidad de buscar herramientas para que las infancias se vinculen con temas que son importantes para ellas. “También hablamos de Educación Sexual Integral y de las orientaciones sexuales. Todo con mucha sutileza y siempre con el apoyo de las ilustraciones, un recurso muy necesario”, expresó Foresti, quien, junto a Samanta, se interesó por la literatura infantil para complementarla con su profesión.

Aunque el libro está pensado para trabajar en consultorios, también cuenta con recursos para llevarlo a las escuelas. “Nos encantaría que se leyera en todos lados y que los chicos encuentren en Guille un aliado”, expresó Alina.