Récord: vendieron un toro a más de $6 millones en la Expo Rural
El reproductor es de una cabaña de La Pampa, y el comprador, un productor de la zona de Villa Dolores.
Hasta los más entendidos quedaron asombrados por el precio y la puja entre compradores. Aplausos, gritos y muchas fotos dominaron las abarrotadas tribunas de la Sociedad Rural de San Luis, cuando el martillero José Talano cerró la venta del Reservado Gran Campeón macho Hereford en nada menos que $6.050.000.
El reproductor llegó de la cabaña La Ñata, de Rancul, La Pampa, y el comprador fue Mauricio Soto, un importante productor de papa de la zona de Villa Dolores.
"Duele desprenderse de estos toros; el comprador pagó ese precio porque vio un futuro padre de cabaña que va a poder imprimir lo mismo que buscamos nosotros en la selección nuestra, que es productividad, un toro apto para desempeñarse y fundamentalmente con aptitud carnicera en un tamaño moderado", explicó Pablo Tommasi, encargado administrativo de la cabaña La Ñata, al terminar la colosal venta.
La comercialización de los machos de seis razas bovinas se concretó ayer y fueron parte del cierre de la 76ª Expo Rural San Luis, la 20ª Expo Granja y la 35ª Expo Nacional de Hereford.
La consignataria Ganadera del Sur SRL fue la que cerró la millonaria venta del toro Hereford, mientras que en el resto de los animales participaron también San Luis Feria SRL y Bressan & Cía.
El Gran Campeón Hereford Macho no corrió la misma suerte. Fue el primero en salir a la pista para la venta, con una base inamovible de $3 millones impuesta por la cabaña Las Tranqueras, de Horacio la Valle y Marta Vila Moret, pero no tuvo oferentes y se volvió a su lugar de origen, en General Belgrano, Buenos Aires.
De todos modos, los La Valle vendieron el sábado la hembra Héreford Gran Campeona en un millón de pesos, el valor más alto de los vientres comercializados.
La cabaña La Ñata tiene el centro en Rancul, donde se hacen los puros, mientras que los puros controlados y puros registrados se hacen a los pocos kilómetros, en Chamaico, que es una zona de monte bastante dura que le imprime la rusticidad.
"A San Luis es la primera vez que venimos y la verdad que nos vamos muy conformes, porque también ayer el desempeño de los precios de las hembras fue más que bueno, donde una de las vaquillonas también se fue para Villa Dolores", valoró Tomassi.
A pesar de la falta de lluvias y la consecuente escasez de pasto, los productores de San Luis se quedaron con gran parte de la genética ofrecida.
La granja se llevó todas las miradas
El sector granja de la 76ª Expo Rural San Luis estuvo mejor organizado que el año pasado debido a que ahora los animales tuvieron un corral propio. “Los productores porcinos trajeron mejores animales, esto se percibió en la jura, ya que no hubo tantos rechazos”, explicó Gonzalo Lucero, presidente del Ateneo Juvenil, que este año organizó el remate y la exhibición.
El centro de atracción en los corrales fue una cerda que llegó parida con ocho lechoncitos, “En el remate se vendió a 300 mil pesos. Si bien parió trece lechones, en el viaje, con el movimiento que se genera en el vehículo, era obvio que alguno iba a pisar”, explicó Lucero.
Este año hubo una menor cantidad de ovejas, “trajeron razas Hampshire down, Drexel y Dorper. Los valores del remate rondaron entre los 150 y 180 mil pesos”, especificó el presidente del ateneo, y añadió que “las cabras se vendieron muy bien, solamente quedaron dos, que tenían una malformación genética y así lo predispuso el veterinario”.
Hubo algunas quejas porque en la muestra no participaron aves de ningún tipo, “estuvimos hablando con los productores hasta último momento, pero debido a las disposiciones de Senasa, por la ola de gripe aviar que hubo en todo el país, decidieron que, aunque estamos en estatus sanitarios libre, todavía los animales no son aptos para exposiciones y ferias a las que asista una gran cantidad de personas”, indicó el joven ateneísta.
Redacción/MGE
Más Noticias