Colores para la voz

Amante de la voz humana y sus distintas sonoridades, Juan Iñaki disfruta de cantar, dar clases y conocer públicos nuevos. Aunque ya visitó San Luis en varias oportunidades, la última vez fue hace más de diez años y ahora regresa para conocer aquellos seguidores que cosechó con sus últimos trabajos

 

El sábado estuvo en la sala Amigxs de Merlo con su concierto íntimo y, además, realizó un taller intensivo de canto. La función del domingo será a las 22:30 en All Right y las entradas se consiguen por la página de Eventbrite a precio promocional de dos por 3.500 pesos.

 

Juan indicó que está muy feliz de regresar luego de una década de ausencias. Sus recuerdos son preciosos porque "me tocó presentarme ante un público extraordinario". Ahora, tocará las canciones de "Vórtice", su último disco de estudio, que nació antes de la pandemia y retrata la necesidad de mirar hacia adentro.

 

"Transito un año extraño, pero la salida del disco me animó un poco. Me lleva de viaje por distintos lugares y me juntó con colegas con los que da gusto coincidir", contó el artista que hace pocas semanas ganó el premio Gardel a "Mejor canción de folclore" gracias a su colaboración en "Baile eterno", un tema que grabó junto con su amiga coterránea Mery Murúa.

 

"Es un reconocimiento, pero también un estímulo para el movimiento que somos porque es así como nos reconocemos y como nos gusta movernos. Todos sentimos que es un poco parte nuestra ese reconocimiento. Recibí la noticia de que mi amiga era premiada de ese modo, con una profunda emoción y sensación de justicia. También creo que los premios muestran una partecita muy pequeñita de lo que es un entramado mucho más grande, que dista mucho de tener todavía una mirada y una presencia federal", contó Iñaki.

 

Juan comenzó a involucrarse con la música desde su infancia. Cuando era un niño lo tomaba como un juego, hasta que se dio cuenta que podía ser el medio por el que debería moverse y trabajar. Rápidamente vinieron los escenarios y empezó a estudiar canto en 1998. "Creo, y muy ágilmente, que fue en un contexto donde estaba de moda que los niños se involucren con la música folclórica, entonces las oportunidades de escenarios, de trabajo, y demás fueron sucediéndose en ese tiempo como muy rápido", agregó el artista cordobés.

 

En un impasse de varios años, Juan delineó su estilo. Aprovechó sus estudios de canto lírico y lo compaginó con el folclore. "Ahí comenzó mi camino profesional que también me llevó a la docencia. Ahora me considero un cantante popular al que se le nota que tomó de esa fuente de estudio. Tuve un paso muy cortito por la ópera y la lírica, y después comencé a formar proyectos que rozan los dos mundos", contó Juan.

 

La crisis que vive el país también afecta al cantautor que expresó que se viven dos panoramas en un mismo tiempo, pero que datan de varios años. "Por un lado, tenemos las producciones artísticas que son maravillosas, abundantes e incesantes. Esa es la buena noticia. La mala noticia es que esto no ha venido más que a profundizar una precarización que el sector experimenta, evidenciada desde la pandemia. No es que la pandemia la desató, pero sí la profundizó, la destrozó", explicó.