Maltrato policial en los barrios: "Tiran gas y golpean a todos"

Vecinos de la zona oeste de la ciudad de San Luis suman sus denuncias a las que realizó una mujer del barrio Solidaridad respecto de la violencia desmedida por parte de efectivos de la Policía de la Provincia. Un joven, quien decidió preservar su identidad y vive con su madre en el barrio Esperanza II, relató cómo, el miércoles 28 por la tarde, efectivos de la División de Respuesta Inmediata Motorizada (DRIM) ingresaron al barrio “repartiendo palos y amedrentando”.

“Había chicos jugando a la pelota y mujeres. Los motorizados llegaron y a los gritos pusieron a todos contra la pared. Algunos vecinos quisieron saber qué pasaba y ahí empezaron a tirar gas pimienta y a repartir palos”, aseguró.

Otros vecinos pudieron registrar en videos los eventos de esa tarde, en donde la violencia “azul” se adueñó de los pasillos de los monoblocks emplazados en Tacuarí y Balcarce, al oeste de la ciudad capital. “Encima que acá los chorros se manejan como quieren, vienen a pegarle y a gasear a la gente del barrio. Sin orden ni nada, somos humildes, pero no somos delincuentes”, dijo otra vecina, visiblemente enojada.

Según relató otro testigo que estuvo durante el rato en que una decena de motocicletas del DRIM ingresó al barrio, entre los pasillos del monoblock se dedicaron a demorar vecinos e identificar a todos los que pasaban. Tras los eventos, un puñado de vecinos se dirigió a la Comisaría 4ª para pedir explicaciones sobre los hechos y para que quede asentado, pero “no fue posible realizar la denuncia, ya que nos dijeron que era un procedimiento; sin embargo, en el barrio no mostraron ningún papel”.

También en el barrio Solidaridad

En una noche que parecía ser tranquila, el barrio Solidaridad de San Luis se convirtió en escenario de un violento enfrentamiento entre vecinos y la Policía. Una mujer de 58 años, denuncia haber sido víctima de un brutal ataque por parte de agentes motorizados, mientras que la versión oficial reduce el incidente a un "control de disturbios". La diferencia entre ambos relatos es abismal.

Ella, graficó que "vivió una pesadilla" en su propia casa cuando agentes de la Policía irrumpieron en el barrio Solidaridad. Según su relato, los hechos ocurrieron alrededor de las 21, cuando un grupo de motorizados de la Policía se lanzó sobre su hijo y un vecino, quienes estaban intentando arreglar un auto antiguo en la calle. "Yo estaba sentada en mi casa cuando, de repente, veo pasar a los motorizados como locos. No pasó mucho tiempo cuando mi hija y un vecino vinieron corriendo a decirme que a los muchachos los tenían rodeados", recordó.

Golpes e insultos

La situación escaló rápidamente. Al intentar averiguar qué ocurría, la mujer asegura que fue atacada con una violencia desmedida. "Soy diabética y hace poco estuve al borde de un ACV. Aún no puedo mover bien una mano y una pierna, pero eso no les importó. Me insultaron, me golpearon y me trataron como si fuera un perro", denuncia con angustia. "Me tiraron al suelo, me esposaron y me patearon en las costillas. No puedo moverme desde entonces", agrega.

Según el testimonio de la mujer, los agentes también maltrataron a su hijo y a otros vecinos que intentaron intervenir. "A mi hijo le dieron una patada en la cabeza mientras me veía en el piso. Él solo intentaba ayudarme, pero lo trataron como a un criminal", contó.

Vecinos de la zona oeste de la ciudad de San Luis suman sus denuncias a las que realizó una mujer del barrio Solidaridad respecto de la violencia desmedida por parte de efectivos de la Policía de la Provincia. Un joven, quien decidió preservar su identidad y vive con su madre en el barrio Esperanza II, relató cómo, el miércoles 28 por la tarde, efectivos de la División de Respuesta Inmediata Motorizada (DRIM) ingresaron al barrio “repartiendo palos y amedrentando”.